“Comer sano no es comer pocas calorías; no es sentirte hambriento. Es nutrir tu cuerpo con alimentos reales”
Un día en una reunión familiar estábamos por comer asado y mi hermana Belu preguntó y para Juan qué hay. Claro, debo aclarar que Juan, mi cuñado, es vegetariano. Para él fideos. Belu medio enojada y medio triste dijo (palabras más, palabras menos) “Juan es vegetariano pero come como nosotros y variado“. Si bien no recuerdo bien exactas sus palabras sí se nos grabó y dejó pensando su reflexión.
Las fotos imantadas son producción total de Belu🤩
Los eventos y reuniones familiares son en torno a la mesa. Nos dimos cuenta que si había asado entonces debía ser asado para todos y que, además, es súper posible. El menú es el mismo porque todos queremos celebrar y reunirnos en a compartir un “gran banquete“.
Con Santi, mi marido, comenzamos a tener en cuenta esto y fuimos aprendiendo muchísimo de Juan y Belu. De hecho lo han premiado como el mejor “probador” de comidas vegetarianas-veganas.
Un día Belu me dijo “hice unos brownies de porotos que son iguales a los clásicos“. Yo la puse en duda, no tanto por la impresión que me causaba solo pensar en porotos y brownies en una misma frase sino, sobre todo, porque ellos realmente tienen otros hábitos alimenticios y no están tan viciados de azúcares, ultra procesados, etc. Sin embargo, al venir un día a casa los trajo y vino la prueba de fuego: mis hijos, especialmente Joaco. Los chicos devoraron y amaron los brownies. De hecho fueron quienes le dieron este nombre a la receta.
La comparto para que dejen los clásicos por esta opción más nutritiva y rendidora. Belu siempre dice que mi especialidad es lo dulce y la de ella lo salado pero creo que no. Creo que nos distingue más el estilo y temperamento al cocinar que si es dulce o salado y esta receta es un ejemplo perfecto de todo esto.
INGREDIENTES
- 1 y 1/2 tazas de porotos ya listos (remojados y hervidos)
- ½ taza de avena (laminada o instantánea)¼ cucharadita de sal
- ⅔ tazas de azúcar mascabo
- ½ taza de agua
- ¾ tazas de cacao amargo
- ½ taza de aceite
- 2 cucharadas de vainilla
- ½ cucharadita de polvo de hornear (o bicarbonato)
CLAVE
- Porotos: tienen que estar blandos y eso se logra remojando muchas horas e hirviendolos. Yo trato de tener ya en el freezer porque los chicos a veces piden algo rico y chocolatoso y así tenés este gran paso adelantado.
- Chocolate: es clave un buen chocolate amargo
- Procesadora: la procesadora siempre es esencial si querés lograr consistencia más cremosa y hacer todo más rápido. Yo decidí invertir en esto y comprar una que sea multifunción de 1000 Watts de potencia porque si no se rompen.
PASO A PASO
- Bueno no se si hay un paso a paso. El estilo de Belu es experimental y siempre distinto según como lo sienta; a mi me cuesta y siempre prefiero el paso a paso detallado. Sin embargo, voy aprendiendo y decidí poner todo en la procesadora, empezando por los porotos que quería que estén lo más procesado posible por los niños.
BENEFICIOS DE LOS POROTOS:
- Ayudan al corazón: Los porotos contienen fibra que ayudan a regular el colesterol en la sangre, previniendo así enfermedades cardiovasculares. Al contener potasio, un mineral que regula la presión arterial, también es recomendado para hipertensos.
- Son antioxidantes: Gracias a esto son capaces de combatir a los radicales libres que dañan las células, por lo que previenen enfermedades degenerativas, el envejecimiento prematuro y algunos tipos de cáncer.
- Alto en fibra y sensación de saciedad: Al dar una sensación de saciedad, evita que se siga comiendo sin parar. Además, contiene mucha fibra que no se digiere, por lo que la mitad de sus calorías son eliminadas por el cuerpo. Además, son bajos en grasas y azúcares.
- Ayuda a los huesos: Estas legumbres contienen calcio por lo que mantienen saludable nuestra estructura ósea.
- Refuerzan el sistema inmunológico: Al aportar vitamina C, que aumentan las defensas del organismo, ayudan al sistema inmunológico a combatir infecciones, virus y bacterias.
- Combaten la anemia: Contienen hierro, mineral que ayuda a prevenirla, además la vitamina C que contienen ayuda a absorber de mejor manera el hierro en el organismo.
- Ayuda al sistema digestivo: Al ser altos en fibras protegen al sistema digestivo, evitando el estreñimiento.
- Diabéticos: Su fibra ayuda a regular el nivel de azúcar en la sangre y al ser carbohidratos complejos, provocan una absorción lenta que también ayuda.
